jueves, 13 de septiembre de 2007

BOCA SIGUE ARRIBA

Boca Juniors recibió al Olimpo conducido por Rivarola en La Bombonera y lo derrotó por 2 a 0 en un encuentro en el que el xeneize siempre fue más y llevó las riendas del desarrollo. Más allá del resultado, muy valorado por cierto, lo mejor para Boca es que ambos delanteros volvieron a convertir. De esta manera, Palacio y Palermo decretaron el resultado. Rodrigo abrió el marcador cuando comenzaba el partido, mientras que Palermo le pidió el penal a Ledesma sobre el final y marcó el segundo.

En cuanto al desarrollo, Boca embistió desde el minuto cero y se acercó al arco defendido por Navarro Montoya, aunque los caminos no eran claros. Tal es así, que a los 7 y cuando Boca tenía el control territorial pero no lastimaba, un pelotazo desde el sector derecho de Hugo Ibarra, cayó en los pies de Palacio que definió a un costado del “Mono”. El 1 a 0 tempranero suponía tranquilidad para el xeneize, pero finalmente no resultó así. Los nervios para Boca llegaron cuando Palacio tenía todo para definir, pero decidió cederle el gol a Palermo que no llegó. A partir de esta jugada, Boca se limitó a controlar al rival, el juego por momentos era demasiado denso y la unión entre Dátolo y Gracián no daba resultado. La sensación al finalizar la primera etapa era agridulce, ya que Boca estaba ganando, pero nuevamente los delanteros estaban erráticos.

En el segundo tiempo los ánimos comenzaron a enervarse teniendo en cuenta que Boca no definía la historia frente a un rival que ofrecía poco y nada en la ofensiva. El juego por parte del xeneize se limitaba a tocar en la mitad del terreno, no había juego profundo y Gracián participaba poco del circuito. Hubo que esperar hasta los 42 para que Rodrigo Palacio encare dentro del área y Pezzotta vea un supuesto penal de Diego Barrado que jamás existió. Las quejas del fondo de Olimpo no valieron de nada y Pablo Ledesma le cedió el penal a un confiado Martín Palermo. El eterno goleador lo cambió por gol decretando el 2 a 0 final.

Como incidencias hay que marcar la expulsión de Villavicencio para Olimpo por doble amonestación en el complemento y el esguince en el tobillo derecho propinado por ex Boca Gustavo Pinto en desmedro de Ever Banega. Por esta jugada y la del penal que no existió, el trabajo de Sergio Pezzotta puede calificarse como regular.

Boca ya está pensando en Banfield en el sur, en un estadio complicado independientemente de cómo llegue el taladro al encuentro.

1 comentario:

Martin Sueldo dijo...

che muy buen blog, encima soy fanatico de Boca, te dejo mi blog si queres e intercambiamos links, crep haberte cruzado en la bombonera porque yo he hecho transmisiones de banfield, un abrazo