EMPATE CON SABOR A DERROTA

Boca Juniors recibió a Racing Club de Avellaneda en La Bombonera y obtuvo tan solo un punto al igualar en 2 tantos. El encuentro presentó un sinfín de situaciones curiosas: 3 penales, resultado cambiante y la polémica salida de Román…

Cuando todos creían que el partido se iba a tornar sencillo para el local, Racing se plantó en la cancha y complicó desde el primer minuto. Tal es así, que la primera chance clara fue para la visita cuando una desatención defensiva entre Matías Silvestre y Claudio Morel Rodríguez, le dio la oportunidad a Racing de concretar. Fue un aviso, ya que en una jugada bárbara por la derecha y una definición exquisita de Gonzalo Bergessio se decretó el 1 a 0 con el cual finalizaría el primer tiempo. El ambiente en el estadio no era el mejor, si a eso le sumamos la ocasión que desperdició Martín desde el punto del penal. 0 – 1 para el entretiempo y a volver a empezar.

La actitud en el complemento fue otra, y luego de algunas chances en los primeros 45, Román puso el empate a los 10, devolviéndole la ilusión a la parcialidad xeneize. El juego comenzó a ser más fluído por parte del enganche, que a esta altura era la figura indiscutida del encuentro, y un nuevo tiro penal no se hizo esperar. Nuevamente las dudas pero Favale pitó. Otra vez Martín, pero esta vez palo y adentro: 2 a 1 y ahora comienza la rotación. La salida más polémica fue la de Román, que miró hacia el banco como no pudiendo creer lo que pasaba. Faltando 12 minutos, Russo decide preservarlo para el próximo miércoles, cuando Boca reciba a Vélez por la Copa. Así, faltando solamente 3 minutos Matías Silvestre tomó al recién ingresado Peralta del hombro y Favale no dudó, es el tercer penal de la tarde. Sava lo cambió por gol y Boca quedó a 4 del puntero San Lorenzo. Ahora se viene la Copa y el margen de error se achica…

Ahora sí…

Antes del encuentro y ante la atenta mirada y el aliento constante de la gente, Guillermo saludó a todos y dio su mensje a través del micrófono: “ Yo se que no me van a olvidar…y yo tampoco a ustedes”. Esta frase quedará por siempre en la memoria del hincha xeneize, que lo va a recordar como el ídolo que es. Además recibió una plaqueta recordatoria, así como un 7 de acrílico, número que lo acompaña hace muchos años en Boca Juniors. La vuelta olímpica marcó el final de un ciclo en la vida de Barros Schelotto, y un cambio grande en su familia. Más de uno dejó caer una lágrima en la tarde de La Bombonera, y la familia del “Melli” se mostró muy feliz con la fiesta del ídolo. “Contaré los días para la vuelta”, fue otra de las frases vertidas por el jugador que generó la ovación de todo el estadio. Nosotros también contaremos los días…

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