Boca no pudo con un rival que siempre lo complica. Colón de Santa Fe lo derrotó por 1 a 0 con un agónico gol de Grasiles a los 47 del complemento. En el xeneize sufrió la expulsión Bruno Urribarri, mientras que el local se quedó sin Ariel Garcé, ambos en el complemento.
En cuanto a lo visto en el terreno de juego, hay que decir que Boca tuvo un desempeño por demás flojo y, si bien los de Astrada no fueron imponentes, lograron quedarse con una victoria que levanta el ánimo de cara a lo que se viene. En la primera etapa jugó su partido la actitud. A Boca le costó en todo momento tomar la pelota y generar jugadas elaboradas, así como asociar juego entre los que más saben con la pelota. El
0 a 0 resume lo visto en esta primera parte.
En cuanto al complemento, la actitud de Colón fue la que marcó la diferencia en el juego, ya que si bien ninguno de los dos desplegaba buen fútbol, era el equipo local el que buscaba en la ofensiva. La expulsión del joven lateral Urribarri, hizo que inmediatamente Russo decida colocar en esa posición a Matías Cahais, formando nuevamente la línea de 4 en el fondo. Más tarde, la idea era meter un doble cambio, por eso estaban a punto de venirse a la cancha Boselli y el debutante Carlos Bueno. En ese instante la expulsión de Garcé paró los cambios de Russo. Boselli ingresó aunque no pudo gravitar, mientras que Bueno todavía va a seguir aguardando su posibilidad.
No hay mucho más para agregar, a excepción del zapatazo espectacular del colombiano Grisales sobre el cierre, que decretó una nueva derrota xeneize en el Cementerio de Elefantes. Ya se analizan en el seno del cuerpo técnico los cambios para el partido del próximo miércoles frente a Olimpo.
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